Como no podía ser de otra forma, en Invierte en Tu Descanso estamos preocupados por vuestro sueño. Hoy vamos a hablar de la importancia que tiene dormir bien. El descanso es fuente de salud y hay que cuidarlo.
Los expertos aseguran que para tener una vida sana la clave es una alimentación saludable, realizar ejercicio físico y dormir las horas necesarias. Siguiendo estos hábitos de vida nuestro cuerpo y mente nos lo agradecerán.
Centrándonos en el mundo del descanso, es importante dormir bien, pero qué significa esto. Cada edad tiene unas necesidades de sueño. Cuando somos más pequeños necesitamos más horas de sueño para crecer de forma saludable. Los niños deben dormir entre 10 y 12 horas al día. En las edades de crecimiento el descanso ayuda a que nuestros huesos se mantengan fuertes. A medida que vamos cumpliendo años, las horas de sueño se reducen. Así, para un adulto se considera un horario de sueño saludable entre 7 y 8 horas de sueño. Llegados a la tercera edad, los problemas de sueño se acrecientan y nos sentimos más cansados.
Nombradas las horas de sueño, cabe seguir con la necesidad de tener un descanso de calidad. Cuantas menos interrupciones tengamos durante el sueño, nos sentiremos más descansado. Para lograr un descanso ininterrumpido es importante dormir sobre un colchón y equipo de descanso adecuado a nuestros gustos y necesidades. En el mercado encontramos gran variedad de tipos de colchones: muelles, muelles ensacados, látex, espumación, con acolchados de viscoelástica, fibras, grafeno, gel… Elegir el colchón es una labor que debe tomarse en serio. En Invierte en Tu Descanso os aconsejamos hacerlo en tiendas especializadas en descanso. Es importante dejarnos aconsejar por profesionales que sabrán dar con el colchón que necesitamos, según sea nuestra morfología, gustos, dolencias.
¿Qué aporta dormir bien?
Si dormimos bien, nuestro cuerpo y mente lo agradece, las personas con problemas para dormir son más propensas a enfermar. Con el sueño nuestro cuerpo se recupera del esfuerzo realizado y aumentan las defensas del organismos. Nuestros órganos funcionan correctamente y se oxigenan y nutren de forma adecuada. El sueño es un proceso biológico natural de los seres humanos y fundamental para la vida.
Si no dormimos bien es un síntoma de alarma, es conveniente acudir a un médico y exponerle nuestro caso. El estrés, problemas respiratorios, malos hábitos, enfermedades cardiovasculares…, pueden estar detrás de nuestro insomnio. Es necesario localizar la causa y ponerle tratamiento. Si te despiertas mucho por la noche, si no logras conciliar el sueño, o te sientes cansado al levantarte. Es importante acudir a un especialista.
Los ciclos del sueño
Durante las horas de sueño experimentamos distintas fases del mismo. Si despertamos a mitad de ciclo, sin que hayamos llegado a completarlo, nos sentiremos más cansados, porque no hemos concluido el proceso que nos permite la recuperación total.
Los expertos hablan de cinco fases en el ciclo del sueño. La fase I es la de vigilia, experimentamos un sueño ligero que nos permite percibir algunos estímulos auditivos y visuales; la fase II el sueño es también ligero pero ya no percibimos los estímulos, no hay movimientos oculares y el tono muscular es algo menor; fase III comenzamos a estar en un sueño más profundo, nuestra tensión arterial disminuye y también el ritmo respiratorio, en ella se producen cambios hormonales, es importantísima para la recuperación física y psicológica; fase IV en ella nuestra actividad cerebral disminuye y nos ayuda a recuperarnos del esfuerzo; la última fase es la REM, la de sueño profundo, en ella es cuando soñamos y alcanzamos la máxima atonía muscular. Lo ideal es despertarnos después de esta fase para estar totalmente recuperados. Este ciclo se repite varias veces durante el descanso.
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